Libertarios y anarquistas en la China ancestral

 En china había tres escuelas de pensamiento político que dio lugar a diversos pensamientos económicos.

 Estaba la escuela legalista, que buscaba la manera de aumentar el poder del estado aconsejando a los gobernantes interesados en ello cómo hacerlo. Por otro lado estaba la escuela taoísta, de donde salieron los primeros libertarios, esta escuela decía que la injerencia del estado en la economía debía minimizarse o directamente anularse. Por último estaban los seguidores de Confucio, quienes optaban por u punto intermedio entre las dos visiones anteriores, en la práctica esta visión intermedia iba encaminada a crear un sistema burocrático que en manos de gente sabia estuviese al frente del gobierno.

Del taoísmo salió Lao Tse, el cual puso en el centro del debate al individuo, siendo este y su felicidad el fin último en el que todo análisis debe centrarse.
Por tanto en base a ello se juzga las instituciones, si una institución como por ejemplo la moneda que permite prescindir del trueque y puede ahorrarse aumenta la felicidad del individuo entonces es buena, por el contrario si una institución disminuye la felicidad del individuo hay que suprimirla o limitarla al mínimo posible, como por ejemplo es el caso del gobierno, que regula al individuo de forma excesiva. En base a este análisis, Lao Tse lo concluye con que la inacción del gobierno hará florecer la economía y aumentará la felicidad individual.
Observó como las regulaciones del gobierno creaban confusión entre los ciudadanos y en últimas creaban revueltas y pobreza, para evitar esto recomendaba la inactividad del gobernante. Lao Tse era pesimista respecto a que el gobierno fuese a disminuir su intervención en la economía y mucho menos que fuese a desaparecer y por lo tanto recomendaba a los ciudadanos ser felices con poco ya que la existencia de un gobierno metomentodo condenaba al ciudadano a la pobreza.


Recordatorio: Los contenidos del pensamiento económico provienen del canal Economic Pills, el cual está inspirado en el libro de Murray N. Rothbard.



Chuang Tzu (zhuangzi) fue discípulo de Lao Tse y podemos considerarle primer anarquista individualista. Chuang Tzu predicaba el orden espontáneo de las cosas y que la perfección que alcanzaba una sociedad conviviendo en libertad era imposible de mejorar vía regulaciones, no necesita un gobierno algo que no debe ser gobernado; la gente en libertad trabaja, nunca se levanta contra nadie ni se rebela, las injerencias del gobierno acaban con esto y crea el conflicto. Además señaló directamente al gobierno como vulgar ladrón, diciendo que un simple ladronzuelo acaba en prisión pero un gran bandido acaba de jefe de estado.


Otro anarquista surgido del taoísmo fue Pao Ching-yen, él decía que tiempo atrás las sociedades vivían idílicamente sin más gobierno que sus biorritmos naturales, posteriormente llegó el gobierno, que con violencia o engaño obligó a las gentes a trabajar más para mantenerle a él y a su estado. Los conflictos en esta sociedad idílica eran pequeños y no escalaban, sin embargo tras el advenimiento de los gobiernos los conflictos empezaron a ser de grandes proporciones, gente sin enemigos eran reunidos para atacar a aquellos que el gobernante consideraba sus enemigos.
Sus críticos la reprochaban el que él no consideraba que puede haber gobernantes buenos a lo que él respondía que nadie que robase lo producido para mantener un estado puede ser bueno, es malo por definición, ya que este robo es impuesto por el fuerte sobre el débil, no es algo voluntario; el objetivo del gobierno no es favorecer a la gente sino controlarla y saquearla. Esta legitimación del gobierno al coger lo que considera justamente suyo lleva aparejado un efecto imitación por parte de las masas, quienes pueden también organizarse para saquear lo que consideran suyo cuando una mayoría social clame por ello.



Ssu-Ma Chien que vivió en el siglo II antes de cristo pregonaba que un gobierno mínimo y sin entrar en competencia con el sector privado hacía posible que los individuos actuando en libertad llenasen a las sociedades de comida y ropa. 
Al contrario de Lao Tse, era más optimista y animaba al individuo a desear cosas y a prosperar ya que este deseo creaba que los bienes y servicios cada vez fuesen mejores y más asequibles llevando al ser humano a una vida más tranquila y confortante. Estos bienes eran creados gracias a la existencia de mercados libres, donde la gente se especializaba y dividía el trabajo produciendo bienes de forma ordenada sin necesidad de intervención alguna.
También habló del empresario y de la acumulación de capital y trabajo por parte de este, el empresario emplea estos recursos productivos en función de como vaya el mercado; si ve que el precio de la carne sube se centrará en que sus empleados usen las instalaciones para alimentar a su ganado, si por el contrario el pollo es el que sube el precio se centrará en criar pollos, todo lo demás en la cadena de producción se mueve en consonancia sin la necesidad de gobierno alguno, el mercado por tanto establece los precios por sí solo; si el mercado se regula por sí solo entonces para que un gobierno.
Además, observó que una acuñación de moneda, o una disminución de la calidad de la misma, hace que se necesite más moneda para comprar los mismo, lo que crea la ilusión de una subida de precios, señalando al gobierno como el mayor adicto a esta mala práctica.




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